¿Qué hacer con una herencia si ésta tiene deudas?

Aceptar una herencia significa adquirir los bienes que un familiar deja al fallecer. La aceptación de ésta es un acto voluntario y libre por el que una persona manifiesta su voluntad de adquirir lo que su familiar le haya dejado. Sin embargo, hay ocasiones en las que esta herencia contienen deudas, por lo que si se aceptan los bienes hay que hacerse cargo de las mismas.

Si estamos en esta situación, habrá que valorar si realmente merece la pena quedarse los bienes en herencia con las deudas que éstos contienen, ya que la aceptación o rechazo de una herencia es algo definitivo, por lo que la decisión debe estar bien reflexionada.

Al aceptar una herencia, podemos hacerlo de forma simple, respondiendo el heredero con su patrimonio personal de las deudas hereditarias, o bien a beneficio de inventario, en cuyo caso el heredero responde de las deudas hasta donde alcance el patrimonio hereditario, de forma que las deudas no se subsanan con los propios bienes.

El procedimiento para determinar si se acepta o no la herencia

Antes de tomar cualquier decisión, lo primero que debe hacerse es realizar un inventario con un abogado especializado en la materia, de forma que se valoren con exactitud los bienes y las deudas que tiene el difunto, además de los gastos que va a conllevar el Impuesto de Sucesiones. De esta forma, podremos tener una idea clara de cuál es la cantidad que se puede conseguir.

Una vez tengamos el inventario terminado, el siguiente paso será decidir si se acepta la herencia, se rechaza o bien se hace uso del beneficio de inventario. En caso de optar por la última opción, la declaración debe hacerse ante notario junto con un extracto de los bienes de la herencia. En cualquier caso, es importante aclarar que el hecho de aceptar la herencia a beneficio de inventario no libera, en ningún caso, del pago del Impuesto de Sucesiones, que deberá abonarse en los plazos establecidos.